SONETO LXVI (Pablo Neruda)

No te quiero sino porque te quiero
y de quererte a no quererte llego
y de esperarte cuando no te espero
pasa mi corazón del frío al fuego.

Te quiero sólo porque a ti te quiero,
te odio sin fin, y odiándote te ruego,
y la medida de mi amor viajero
es no verte y amarte como un ciego.

Tal vez consumirá la luz de enero,
su rayo cruel, mi corazón entero,
robándome la llave del sosiego.

En esta historia sólo yo me muero
y moriré de amor porque te quiero,
porque te quiero, amor, a sangre y fuego.

Pablo Neruda


...y así es como yo te quiero... y tu... y tu me haces platónica

lauren

Corrosión Estelar

Debiera el cristal oscurecerse ante mis sentimientos. No son malos, son secretos.
El pesar es causa de tormento y la soledad argumento que me avate.

No debieras denigrarte mostrando autosuficiencia
 eres controversia.

Necesito asegurarme para no pesnar dormida...
Te quiero al despedirme.
Saludo y regreso.

Nunca olvides por favor nuestra amistad.

LDV